Redacción: Ángela Martín Díaz (@angelaamartin25)
El cuadrilátero se ha convertido en una zona de ocio para los jóvenes, pero también ha generado diversas quejas en los vecinos.
Lo que comenzó como un lugar de entretenimiento acabó convirtiéndose en conflictos, agresiones sexuales y amenazas.
Estefanía, joven de 24 años que solía acudir nos comenta su experiencia. “Al principio era un lugar tranquilo, pero con el paso de las semanas era muy inseguro ir. Me acosaban constantemente, estaba incómoda” Los casos de abuso a mujeres aumentaron notablemente debido a estas fiestas. Se llegaron a conocer un total de 3 supuestas víctimas por violación.
Las peleas se convirtieron en lo más habitual, Pedro nos comenta “Te sacaban navajas y te amenazaban si no les dabas dinero o tú cartera”. Esto acabó con peleas masivas donde las botellas se lanzaban mutuamente. “Un día llegue a mi coche y lo encontré lleno de sangre” comentó Lucas, trabajador de un bar en el cuadrilátero.
La presencia policial tuvo que aumentar sus servicios y con ello el ocio en el cuadrilátero se fue reduciendo.
La Voz de la UFPC 